Una instalación nueva de Windows 10 ocupa unos 15 GB de espacio de almacenamiento. La mayor parte se compone de archivos reservados y del sistema, mientras que 1 GB lo ocupan las aplicaciones y los juegos predeterminados que vienen con Windows 10.
Una instalación nueva de Windows 10 ocupa unos 15 GB de espacio de almacenamiento. La mayor parte se compone de archivos reservados y del sistema, mientras que 1 GB lo ocupan las aplicaciones y los juegos predeterminados que vienen con Windows 10.